La aprobación de un ETF de Bitcoin supondría un hito importante para la adopción de Bitcoin. Los ETF serán un instrumento financiero de fácil acceso que ayudará a establecer la legitimidad del Bitcoin y tendrá la capacidad de atraer a un público más amplio, probablemente miles de millones de personas (ya hemos visto algunas campañas de marketing de ETF de Bitcoin). Gracias a su esperado impacto, el ETF de Bitcoin también permitirá que más instituciones (y menos clientes minoristas nativos de criptomonedas) accedan indirectamente a Bitcoin, y atraerá más talento a esta industria.
Una vez aprobado, el ETF de Bitcoin puede considerarse una gran victoria para la industria. Ahora bien, en mi opinión también debemos reconocer que la prevalencia de los ETF de Bitcoin puede aumentar el riesgo de sobrefinanciación de esta moneda (es decir, "No son tus claves, no son tus monedas"). Si el Bitcoin se convierte en un mero activo de inversión, y si se acaba manteniendo la mayoría de los Bitcoins a través de ETF de Bitcoin en lugar de que miles de millones de personas los posean y utilicen directamente, el Bitcoin podría convertirse en un mero adorno del sistema financiero heredado y, en última instancia, perder su independencia como red descentralizada global. Así pues, como muchos otros aspectos de las criptomonedas, el ETF de Bitcoin viene acompañado de una gran controversia.
Tanto si consideramos el ETF de Bitcoin como una tabla de salvación o un caballo de Troya de TradFi, su llegada es inevitable. La forma en la que reaccionamos a su aprobación determina nuestro camino a seguir. Abraham Lincoln dijo en una ocasión que la mejor manera de predecir el futuro era crearlo. Creo que estamos ante uno de esos momentos en los que los participantes de la industria tienen que decidir cómo reaccionar y escribir el futuro. ¿Cuál es nuestro objetivo para el futuro? No olvidemos por qué surgió el Bitcoin. Hace unos 15 años, el 3 de enero de 2009, se acuñó el primer Bitcoin. Se creó para eliminar intermediarios, devolver el control a las personas y desarrollar un sistema sin permisos ni confianza para aumentar la transparencia y la libertad en todo el mundo. Si el objetivo final del Bitcoin es convertirse en un activo de inversión, habremos fracasado en su propósito original de transparencia y libertad sin permisos.
A pesar de que la red de Bitcoin lleva 15 años funcionando, podemos afirmar que aún nos encontramos en las primeras fases de desarrollo de este sistema global. Por un lado, el número total de direcciones de Bitcoin era de unos 1,200 millones en noviembre de 2023, alrededor del 15 % de la población mundial total. Está claro que queda mucho camino por recorrer para que el Bitcoin llegue a miles de millones de personas, como pretendía su creador. Por otro lado, y aparte de ser un depósito de valor y un activo con el que se puede hacer trading, el Bitcoin todavía tiene que ofrecer otro valor como red global que sea reconocido por todos. Algunos desarrolladores y empresas trabajan actualmente en soluciones de capa 2 como Lightning para convertir el Bitcoin en un instrumento de intercambio global, mientras que otros intentan analizar su programabilidad a través de taproot, BRC20 y ordinales. Todos estos esfuerzos son fundamentales para definir lo que será la red de Bitcoin en el futuro.
OKX lleva más de una década en la industria de las cripto. Como integrantes de la plataforma, celebramos este hito tan esperado y con él la realidad de que el Bitcoin ya no se puede ignorar. Una vez aprobado, el ETF de bitcoin supondrá un importante avance para la industria. Pero debemos ser conscientes de que no nos podemos conformar. Si no queremos que el Bitcoin (y las cripto en general) queden a merced de Wall Street, tenemos que seguir construyendo e innovando en paralelo. En OKX, estamos comprometidos con la innovación y el crecimiento del ecosistema. Nuestro panorama es muy variado, y en los próximos años seguiremos creciendo:
Desarrollar nuestro producto de exchange centralizado con el objetivo de ofrecer una pasarela segura, localizada y que cumpla las regulaciones a un mayor número de clientes en todo el mundo. Queremos estar preparados para ayudar a los clientes cuando lo necesiten.
Invertir en OKX Wallet, MPC y tecnología de conocimiento cero (ZK), y herramientas y análisis onchain. Creemos que, en última instancia, el futuro está descentralizado. Queremos facilitar un control más accesible a más personas mediante una billetera de autocustodia segura, práctica y potente.
Respaldar a los desarrolladores de código abierto mediante subvenciones. Aún queda trabajo por hacer en la red de Bitcoin para mejorar su seguridad, privacidad y usabilidad. Muchos desarrolladores trabajan también en otros protocolos para resolver el problema de la escalabilidad.
Trabajar con los contratistas, empresarios y desarrolladores para fomentar la innovación en el ecosistema. Las innovaciones tecnológicas marcan el rumbo que seguimos.
Cuando Satoshi escribió el White Paper, nadie sabía si el Bitcoin sobreviviría. Ahora su capitalización del mercado casi duplica la de VISA, y su cuarto halving está a la vuelta de la esquina. En cierto modo, si se aprueban los ETF de Bitcoin en EE. UU., será una señal de que las reglas del juego están cambiando. Este mensaje abre la puerta a que más inversores accedan a Bitcoin de forma indirecta. También recuerda a los desarrolladores e innovadores que debemos seguir trabajando para que cada vez más personas quieran y puedan acceder directamente al Bitcoin. Nos enfrentamos a la inmensa fuerza de la financiarización. Solo podemos ganar si creamos una solución viable y 10 veces mejor que la existente. Y se nos acaba el tiempo.
Hong Fang
Presidenta de OKX
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